El 9,3% de las víctimas de violencia de género en Córdoba se acogen a la dispensa de la obligación legal de declarar o, lo que es lo mismo, renuncian a seguir adelante con su denuncia y el proceso judicial. Según los datos del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), durante el primer semestre de este año se han contabilizado 73 renuncias de las 787 víctimas registradas en la provincia cordobesa. A nivel nacional, el porcentaje de víctimas que se acogieron a la dispensa de declarar se elevó al 14,6%, un dato que preocupa al Observatorio.
Así, la presidenta del mismo, Ángeles Carmona, ha insistido en «la necesidad de potenciar los recursos sociales y asistenciales a disposición de las mujeres maltratadas, para que ninguna sienta desamparo y soledad en el difícil proceso que se abre tras la denuncia». Y es que detrás de las renuncias a seguir adelante se encuentran muchas veces las presiones del entorno, la dependencia económica respecto al maltratador o el miedo a volver a enfrentarse al agresor en el juicio. En este sentido, Carmona ha querido «resaltar el valor, la fuerza y el ejemplo social de las mujeres que se atreven a denunciar y a continuar el proceso judicial».
Mientras tanto, el Observatorio destaca el aumento de condenas a maltratadores «por lo que tiene de valor en sí mismo y por el mensaje ejemplarizante que desprende: no hay impunidad para la violencia machista», en palabras de su presidenta. En el caso de Córdoba, de enero a junio se ha enjuiciado a 164 hombres denunciados por violencia de género y se ha condenado a 128, lo que supone el 78%. Con respecto al mismo periodo del año anterior, el porcentaje ha aumentado en ocho puntos, ya que en los primeros seis meses del 2015 se condenó a 102 de 146 enjuiciados, el 70%. Unos números que son aún más significativos al compararlos con los del 2010, cuando el 62% de las sentencias en Córdoba eran absolutorias, según un estudio del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) titulado El silencio de las víctimas.
En cuanto al número de denuncias por violencia de género, las cifras se mantienen en Córdoba respecto al año pasado. En el primer semestre de 2016 se han registrado 787 frente a las 789 contabilizadas en el mismo periodo del 2015. De las 787 de este año -una media de cuatro al día-, la mayoría (752) llegaron a través de un atestado policial con denuncia de la víctima y 24 derivaron de partes de lesiones, mientras que solo tres fueron formuladas por familiares. Precisamente, el Observatorio hace hincapié a nivel nacional en este aspecto, al pedir mayor implicación de familiares y amigos a la hora de destapar y denunciar casos de violencia. «Es en ese terreno, el de la concienciación y sensibilización social y familiar, donde más podemos ganar en el combate contra el terror de género», ha señalado Ángeles Carmona.
Respecto a la relación de las víctimas y los agresores, el 40% de los denunciados habían mantenido una relación afectiva con las maltratadas, el 24% eran cónyuges, el 22% sostenían una relación afectiva y el 13% habían roto la unión matrimonial.
Fuente: diariocordoba.com
